El mundo sigue su curso y cada día nacen nuevos futuros lectores y cinéfilos que deberán saber apreciar un buen libro del pasado y contemplar una buena película del mismo antes de poder evaluar coherentemente las del presente. De allí que algunas piezas de maravillosa factura deben ser preservadas y difundidas. Particularmente adepto a las películas de Jean-Jacques Annaud y aceptando las tortuosidades de Humberto Eco, debo admitir que la película es mucho más sorprendente que el dificultoso libro. El nombre de la rosa (título original: Der Name der Rose) fue estrenada en 1986, basada en la novela homónima escrita por Eco y protagonizada por Sean Connery (en el papel del fraile franciscano Guillermo de Baskerville) y Christian Slater (como el novicio Adso de Melk). La trama se desarrolla en una abadía Benedictina de Italia que ha sido sacudida por un hecho inexplicable, uno de sus monjes ha muerto de una forma muy misteriosa. Para investigar tan extraño suceso, deciden confiar en un monje franciscano, (Sean Connery) quien llega a la abadía acompañado de su joven discípulo (Christian Slater), para una reunión entre la legación papal y los llamados "espirituales" de la recién nacida orden franciscana. Guillermo de Baskerville, otrora inquisidor, posee una inteligencia y perspicacia que no concuerda con la humildad de un buen franciscano, pero es precisamente por pensadores de la época como Roger Bacon y Guillermo de Occam; promotores de la ciencia y el razonamiento lógico como un don divino, que Guillermo de Baskerville va desentrañando los secretos que oculta esta abadía enclavada en el norte de la Italia del Siglo XII.
Si hay algo que Annaud hace con mano certera es el casting y la ambientación de sus películas. En esta obra podremos "sentir" el frío y las calamitosas condiciones de vida. Casi diría que se nos está dado percibir hasta los olores que impregnarían los ambientes recreados. También resulta maravillosa la elección y modificación de las facciones para cada uno de los personajes que Annaud pone en juego. Baste mencionar que Ron Perlman fue elegido por Annaud en varias de sus películas antes que Guillermo del Toro lo notara.
Espero puedan disfrutar de esta obra tanto como yo lo hago. En el caso que no puedan acceder a ella por los medios recomendados, les acerco una dirección de red para la película y otra para los subtítulos. De la misma forma, les dejo un enlace para ponerse en contacto con la obra original. Los llevo hasta la puerta y me despido hasta la próxima.
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